Miembros de la comunidad indígena latina de Los Ángeles, algunos de ellos con trajes tradicionales, se encontraban entre los manifestantes frente al recinto del Concejo Municipal y las oficinas de los concejales recientemente.
Ron Herrera, uno de los líderes sindicales que se escuchan en la conversación grabada, dimitió el lunes 10 de octubre como presidente de la Federación de Trabajadores del Condado de Los Ángeles. Los otros dos concejales presentes, Kevin de León y Gil Cedillo, han rechazado hasta ahora los llamamientos para que dimitan.
Por cierto, los concejales conforman un mosaico de hispanos: los tres nacieron en Estados Unidos en el seno de familias inmigrantes, la de Martinez y Cedillo, de México y la de De León, de Guatemala.
A Miguel Villegas, de 32 años, quien rapea en inglés, español y mixteco, una lengua indígena, los insensibles comentarios de la grabación le trajeron recuerdos de las burlas que sufrió cuando crecía en el Valle Central de California.
“Los mexicanos me discriminaban por ser indígena y los estadounidenses por ser inmigrante”, dijo.
Hijo de recolectores de uva, cuando llegó de niño a Estados Unidos desde Oaxaca solo hablaba mixteco, Villegas se apresuró a aprender inglés y español y a ocultar sus raíces indígenas.
Más tarde, recuperó su identidad, dijo Villegas, cuyo nombre artístico es Una Isu.
“El hecho de que esos comentarios se hicieran públicos no hizo más que confirmar que la opresión y la discriminación no han terminado”, afirmó. “Tuve la misma sensación que cuando Donald Trump llegó a la presidencia. El racismo se hizo más público y visible”.
Una de sus canciones se llama “Mixteco es un lenguaje”.
“Esto va para los que insultan a todos mis oaxaqueños”, dice la letra. “Pequeños pero corazones de guerrero. Preservando la cultura, seguiremos creciendo”.