Los residentes permanentes legales —personas con green card— fueron incluidas en los indultos presidenciales. Pero quedaron fuera muchos inmigrantes en riesgo de deportación debido a sentencias por marihuana. La orden de Biden no dio instrucciones a las autoridades federales de inmigración para que dejaran de deportar a inmigrantes por posesión de cannabis, según una carta enviada a Biden en noviembre por decenas de grupos de defensa de derechos civiles y de inmigrantes.
“Usted basó la proclamación del 6 de octubre en la búsqueda de la igualdad racial, y señaló que ‘las personas negras y de color han sido arrestadas, procesadas y sentenciadas a tasas desproporcionadas’”, escribieron las organizaciones. “Sin embargo, ha excluido a los inmigrantes negros y de color que enfrentan el mismo racismo estructural que los ciudadanos estadounidenses”.
Kenault Lawrence, de 38 años, emigró de manera legal a Estados Unidos cuando tenía 10 años, se instaló en Front Royal, Virginia, y se graduó en la escuela secundaria como campeón de lucha invicto. Años después de dos sentencias por delitos menores en Virginia por posesión con intención de distribución de menos de media onza de marihuana, Lawrence estuvo detenido por agentes federales durante más de un año y fue deportado a Jamaica.
Su primer hijo nació meses después de su detención en 2011, y Lawrence fue deportado en 2012, lo que lo obligó a pasar casi una década lejos de su esposa, ciudadana estadounidense, y su hijo.
Los grupos activistas pasaron casi nueve años trabajando para lograr que Lawrence regresara a Estados Unidos. Pero tras lograr al fin volver a casa el año pasado, sigue enfrentando la posibilidad de ser deportado de nuevo si no logra persuadir a un tribunal migratorio de que cancele de forma permanente su deportación. Dado que sus cargos se emitieron bajo leyes estatales e incluían la intención de distribución, y debido a que la orden presidencial no abordó las deportaciones, el indulto de Biden no lo ayudará.
“Esto es Estados Unidos”, sentenció Lawrence, y agregó que, aunque se siente agradecido de estar en casa, le preocupa que su consumo de marihuana de hace décadas pueda alejarlo de su hogar nuevamente. “La gente fuma marihuana y, como sabes, ahora es legal. En ese entonces solíamos ocultarlo”.
El indulto de Biden podría haber ayudado a llevar a los partidarios demócratas a las urnas en las elecciones de medio mandato, al servir como una especie de anticipo político para aquellos que querían que el presidente fuera mucho más allá.