La lista de invitados al primer lunes de mayo, como también se conoce a la Gala del Met, sirve como una prueba de Rorschach para interpretar a quién considera importante Anna Wintour ahora mismo. Entre los asistentes de este año había asistentes frecuentes como Kim Kardashian, Gigi Hadid y Serena Williams, así como nombres nuevos: Brittney Griner, la estrella de baloncesto que recientemente estuvo detenida en Rusia, la artista musical Doja Cat y —sorprendentemente— Paris Hilton. (¿Cómo es posible que nunca antes hubiera ido? ¡Un descuido grotesco!).
Cada año, el código de vestimenta va al ritmo del tema del espectáculo, que en esta ocasión se dedicó a la carrera de seis décadas y media de Karl Lagerfeld. Muchos invitados fueron de blanco y negro o llevaron trajes y vestidos con perlas o flores, dos de los motivos favoritos de Lagerfeld. Bad Bunny se decantó por un traje completamente blanco con una estola de flores de tela que fungía de cola. Janelle Monáe dio una actuación en la alfombra al despojarse de un enorme abrigo de Thom Browne para dejar al descubierto un miriñaque traslúcido. Doja Cat y Jared Leto rindieron tributo, cada uno por su lado, a Choupette, la amiga felina de Lagerfeld. Kylie Jenner, Gabrielle Union, Salma Hayek Pinault y Pedro Pascal destacaron en rojos candentes y Lil Nas X se robó el show con pintura corporal plateada y poco más.
Hubo muchos vestidos maravillosos que rindieron homenaje al legado de Lagerfeld; de hecho, hubo demasiados para mencionarlos. También hubo muchos atuendos que se veían geniales (Halle Bailey, Camila Morrone, Naomi Campbell, Keke Palmer y Aurora James, solo por nombrar algunos). Así que aquí hay un recordatorio: los atuendos que se presentan a continuación tuvieron más éxito en la Gala del Met, no son necesariamente los mejores, no son tampoco necesariamente los peores, solo son los más. Para los muchos más que no citamos aquí, asegúrate de mirar nuestras fotos de la alfombra roja.
Michaela Coel: más adornada
Una de las ideas detrás de su atuendo de Schiaparelli era “clutching of the pearls”, una frase que juega con una expresión en inglés para referirse a la mojigatería de ciertas mujeres: agarrarse las perlas. Y vaya que hubo bastantes perlas —y piedras, cristales y dorado— que agarrar.
Anok Yai: más cumulonimbo
Una nube de lluvia, pero que brille. El vestido de lentejuelas dorado y plateado sin tirantes de Prabal Gurung de Yai se arqueaba dramáticamente en sus caderas, lloviendo en chorros plateados hasta sus pies.
Doja Cat: el festín más elegante
Doja Cat se inclinó tanto hacia su nombre como al tema, vestida en un homenaje la afamada gata blanca de Karl Lagerfeld, Choupette. Llevaba un vestido plateado sin espalda con capucha de Oscar de la Renta con una cola de plumas blancas. La mejor parte del atuendo, sin embargo, estaba adherida a su rostro: prótesis felinas hechas a la medida.
Bad Bunny: más flores (no las contamos)
No vayas a pisar la cola de Bad Bunny, pero déjate entusiasmar por ella. El traje blanco del músico, de Simon Porte Jacquemus, era seriedad por enfrente, fiesta por la espalda. O más bien, sin espalda, ya que la chaqueta tenía un gran recorte.
Dua Lipa: más tapizado
Como muchas, la copresidenta de la velada optó por nutrirse directamente a la fuente, con un vestido de Chanel de tweed blanco con el estilo de un modelo que Claudia Schiffer usó en 1992. (¡Revisa los bolsillos!) Puntos extras para Lipa por la joyería discreta, un collar de diamantes Tiffany de solo 100 quilates.
Phoebe Bridgers: más esquelético (pero bien)
Los fanáticos habrán notado de inmediato la relación entre el traje de esqueleto característico de Bridgers y su vestido Tory Burch para la Gala del Met. El lunes, la artista cambió sus huesos habituales por, apropiadamente, un vestido negro tachonado con perlas estratégicamente ubicadas.
Taika Waititi: más perlicioso
En una velada en la que no faltaron las perlas, las de Waititi —solo dos hilos colgados de su cuello que llegaban hasta justo abajo de sus caderas— caían sobre una chaqueta de esmoquin gris nacarada de Prabal Gurung.
Gisele Bündchen: más ¿quién te conoce, Tom Brady?
Su vestido blanco de Chanel lo alargaban brillantes columnas de paneles, pero la parte más notable de su conjunto fue una capa de plumas blancas que agitó para darle más dramatismo. Con reminiscencias de un ángel, se podría decir.
Brian Tyree Henry: más magistral
La tenida de Henry para la noche tenía otros elementos encantadores —entre ellos, por supuesto, las perlas— pero el más importante fue su capa, apilada con volantes negros ingeniosamente estructurados.
Pedro Pascal: más papi de internet
Hay muchas cosas que se podrían escribir sobre la combinación de bloques de color rojo y negro de Pascal el lunes por la noche, pero seamos honestos, todos estamos pensando en los pantalones cortos.
Lil Nas X: más escultural
Todo el cuerpo del músico, con excepción de una tanga, estaba cubierto de pintura plateada y diamantes falsos, como un hombre de hojalata de alta moda por vía de Pat McGrath. Por favor que alguien haga una foto de su asiento luego de la cena.
Rihanna: más paciencia, que ya verás
Llegó a las 10:15 p. m., una tardanza con la que solo Rihanna podía salirse con la suya y caminó por la alfombra con una apariencia más bien elíptica, enfundada en un huevo color crema de camelias de Valentino. ¿Cómo se sentía? “Cara”, dijo.
Jared Leto: más peludo
Leto asumió el papel de mascota con un disfraz de gato blanco gigante, otro guiño a la querida mascota de Lagerfeld. Después de haber asustado buen rato al cuerpo de prensa, se quitó el disfraz, revelando una sombra de ojos azul pálido que hacía juego con los grandes ojos del gato.
Janelle Monáe: más fiel a su costumbre
Lo que comenzó como un abrigo de tweed de gran tamaño terminó como un bikini negro brillante cuando Monáe reveló capa tras capa, incluido un gran miriñaque, de Thom Browne. (Podía haberse llevado el premio por la menor cantidad de ropa en la alfombra si Lil Nas X no hubiera acudido).
Billie Eilish: más hechizante
El vestido de corsé transparente de Simone Rocha que llevó la artista combinaba con su cabellera, flanqueada por pasadores negros brillantes a cada lado de su rostro. Un cambio del look de bombón rubio que llevó el año pasado.
David Byrne: mejor accesorio
El líder de Talking Heads no tuvo que preocuparse de que su bicicleta subiera los escalones. Alguien vino a llevársela antes de que él ascendiera.
La cucaracha: más 15 segundos de fama
Una asistente sin invitación se escabulló por la alfombra mientras la multitud esperaba que Rihanna apareciera. Se hicieron chistes de “¿quién te vistió?”.
Madison Malone Kircher, Stella Bugbee y Anna Grace Lee colaboraron con reportería.